ARTe
Buscar este blog
sábado, 12 de diciembre de 2015
jueves, 20 de diciembre de 2012
El genio creador... una rima de Gustavo Adolfo Bécquer
Sacudimiento extraño
que agita las ideas
como huracán que empuja
las olas en tropel.
Murmullo que en el alma
se eleva y va creciendo
como volcán que sordo
anuncia que va a arder.
Deformes siluetas
de seres imposibles,
paisajes que aparecen
como al través de un tul.
Colores que fundiéndose
remedan en el aire
los átomos del iris
que nadan en la luz.
Ideas sin palabras,
palabras sin sentido;
cadencias que no tienen
ni ritmo ni compás.
Memorias y deseos
de cosas que no existen;
accesos de alegría,
impulsos de llorar.
Actividad nerviosa
que no halla en qué emplearse;
sin riendas que le guíen
caballo volador.
Locura que el espíritu
exalta y desfallece;
embriaguez divina
del genio creador.
Tal es la inspiración.
Gigante voz que el caos
ordena en el cerebro
y entre las sombras hace
la luz aparecer,
brillante rienda de oro
que poderosa enfrena
de la exaltada mente
el volador corcel.
Hilo de luz que en haces
los pensamientos ata,
sol que las nubes rompe
y toca en el cenit.
Inteligente mano
que en un collar de perlas
consigue las indóciles
palabras reunir.
Armonioso ritmo
que con cadencia y número
las fugitivas notas
encierra en el compás.
Cincel que el bloque muerde
la estatua modelando,
y la belleza plástica
añade a la ideal.
Atmósfera en que giran
con orden las ideas,
cual átomos que agrupa
recóndita atracción.
Raudal en cuyas ondas
su sed la fiebre apaga,
descanso en que el espíritu
recobra su vigor.
que agita las ideas
como huracán que empuja
las olas en tropel.
Murmullo que en el alma
se eleva y va creciendo
como volcán que sordo
anuncia que va a arder.
Deformes siluetas
de seres imposibles,
paisajes que aparecen
como al través de un tul.
Colores que fundiéndose
remedan en el aire
los átomos del iris
que nadan en la luz.
Ideas sin palabras,
palabras sin sentido;
cadencias que no tienen
ni ritmo ni compás.
Memorias y deseos
de cosas que no existen;
accesos de alegría,
impulsos de llorar.
Actividad nerviosa
que no halla en qué emplearse;
sin riendas que le guíen
caballo volador.
Locura que el espíritu
exalta y desfallece;
embriaguez divina
del genio creador.
Tal es la inspiración.
Gigante voz que el caos
ordena en el cerebro
y entre las sombras hace
la luz aparecer,
brillante rienda de oro
que poderosa enfrena
de la exaltada mente
el volador corcel.
Hilo de luz que en haces
los pensamientos ata,
sol que las nubes rompe
y toca en el cenit.
Inteligente mano
que en un collar de perlas
consigue las indóciles
Glorieta Bécquer, Sevilla, oct.2014 |
Armonioso ritmo
que con cadencia y número
las fugitivas notas
encierra en el compás.
Cincel que el bloque muerde
la estatua modelando,
y la belleza plástica
añade a la ideal.
Atmósfera en que giran
con orden las ideas,
cual átomos que agrupa
recóndita atracción.
Raudal en cuyas ondas
su sed la fiebre apaga,
descanso en que el espíritu
recobra su vigor.
Tal es nuestra razón.
Con ambas siempre en lucha
y de ambas
vencedor,
tan solo al genio es dado
a un yugo atar las dos.
viernes, 14 de diciembre de 2012
creatividad_educación_filosofía (lista de reproducción)
un recorrido por distintas interpretaciones de creatividad, educación, filosofía...,
no necesariamente por este orden...
(abre la lista de reproducción al pie, y escoge aquella que te convenga)
no necesariamente por este orden...
(abre la lista de reproducción al pie, y escoge aquella que te convenga)
domingo, 29 de julio de 2012
EL ARTE: ESPEJO DE UNA HISTORIA ÍNDICE Y BIBLIOGRAFIA
EL ARTE: ESPEJO DE UNA HISTORIA
BIBLIOGRAFÍA
De los cuadernos de BBAA:
(mmha, 1998)
ÍNDICE
BIBLIOGRAFÍA
BALMES, J.: El criterio. Barcelona, Juventud, 1993.
DD.AA.: Sobre la crítica d'art i la seva presa de posició.
Barcelona, llibres de Recerca, MACBA, 1996.
|
|
DESCARTES: Discurso del
método. Barcelona, Orbis, 1983.
GOMBRICH, E.H.: Historia del Arte. Barcelona, Garriga, 1992.
HOLLINGSWORTH, M.: El arte en
la historia del hombre. Barcelona,
Serres, 1991.
NIETZSCHE, F.: Más allá del bien y del mal. Barcelona,
Orbis, 1983.
ORTEGA I GASSET, J.: El
espectador. Madrid, Alianza, 1969.
|
|
SERPELL, R.: Influencia de la
cultura en el comportamiento.
Barcelona, CEAC, 1981.
|
De los cuadernos de BBAA:
DD.AA.: Documents
1.1
DD.AA.: Documents
1.2
DD.AA.: Documents 2.1
De consulta y apoyo:
ORTEGA I GASSET, J.: La rebelión de las masas. Orbis, 1983.
Catálogos, diccionarios, enciclopedias.(mmha, 1998)
EL ARTE: ESPEJO DE UNA HISTORIA VI
EL ARTE: ESPEJO DE UNA HISTORIA
(mmha, 1998)
VI-REFLEXIONES FINALES
Nadie tiene en sus manos verdades absolutas, tampoco en arte, el
contexto del momento en que se "revisa" una supuesta obra de arte,
hace ver las cosas de maneras diferentes, lo que ayer fue calificado de
estrafalario, hoy puede ser considerado una gran obra de arte, y a la inversa.
Que cada cual cuelgue o coloque, si así lo desea, en su casa lo que
quiera o pueda y si, además, lo que hoy le gusta, siendo asequible
económicamente, el tiempo lo revaloriza ¡felicidades!, sus nietos o bisnietos le
recordarán y le estarán agradecidos, con suerte se encontrarán con una obra de
arte y, si no, disfrutarán de un rendimiento por su
"inversión".
Antes de tirar al mar el polvo en el que, según algunos, se convirtió
el arte en manos de Picasso (y otros), o de reciclarlo, con un aglutinante y
disolvente, en líquido para limpiar pantallas de ordenador, me gustaría incluir
otro tipo o faceta del arte: ES DIVERTIDO Y UN PLACER PRACTICARLO.
No voy a profundizar en ello, pero me gustaría comentar que, si bien
hay infinidad de teorías y aplicaciones de la imagen, en pedagogía y psicología,
también es cierto que la práctica del arte, como acción, es apenas valorable
como terapia, aplicable en la psiquiatría, en la rehabilitación de enfermos por
adicción o, en la tan cacareada reinserción, yo lo llamaría reconciliación con
el mundo, carcelaria.
Debemos subir al carro de los acontecimientos, sería sabio por nuestra
parte saber compaginar las nuevas tecnologías con el amor al arte, como
observador, como pensador, como creador.
En este sentido, nosotros, los artistas, jugamos con ventaja, por una
cuestión de supervivencia ya nos movemos entre la tierra y el cielo, quise
decir entre dos mundos, el de un trabajo remunerado por un lado, y el de la
idea, la imaginación, por otro.
Mientras, aún hay gente que no se ha dado cuenta que en Berlín ya no hay
muro que le impida pasar al otro lado y, el que lo sabe, piensa que con el muro
desapareció el otro lado.
Hablando del muro, pensar que en arte está todo hecho es inmaduro, aún
falta lo que está por hacer.
Cuando era
una adolescente, con la "tele" y una vez pisada la Luna, pensé que no
quedaba nada importante que pasar en el mundo que me había tocado vivir, es
evidente que para bien y para mal, me equivoqué, el último cuarto de siglo, a
todos los niveles ha sido trepidante, de vértigo.
Es posible que las máquinas algún día lleguen al poder, o nos
alimentemos con pastillas exclusivamente, hasta es probable que viajemos en el
tiempo, de hecho ya han conseguido desintegrar una materia y volverla a
componer, lo que no recuerdo es si era una patata o una pelota de golf, pero
cuando esto ocurra, a pesar de los años que llevan amenazándonos, ya será mucho
más allá del 2000.
Y el arte, como fenómeno de expresión material de la mente de individuos, tocados o no por el genio, el talento o la locura, permanecerá.
Cambiará el espectador, el escenario, su lectura, pero en tanto exista un solo ser humano, él, el arte, seguirá ahí.
Y el arte, como fenómeno de expresión material de la mente de individuos, tocados o no por el genio, el talento o la locura, permanecerá.
Cambiará el espectador, el escenario, su lectura, pero en tanto exista un solo ser humano, él, el arte, seguirá ahí.
(mmha, 1998)
EL ARTE: ESPEJO DE UNA HISTORIA V
EL ARTE: ESPEJO DE UNA HISTORIA
(mmha, 1998)
(*) 15 años después la ironía de la enciclopedia en el metro pierde sentido, pero el resto sigue vigente, llevar una "tablet" por mucho que esté conectada a internet, no te hará COMPRENDER un texto... (mmha, 2012)
ÍNDICE Y BIBLIOGRAFIA
V-JUICIO ESTÉTICO (o algo así, y a propósito del crítico)
Si fuese posible dejar un vulgar cristal roto en la orilla del mar, y
recogerlo después de un tiempo, lo encontraríamos transformado, probablemente,
en un bonita piedra mate, con los cantos redondeados y alguna curiosa forma...
Sabemos que si bien hoy una determinada obra de arte es
incuestionable, no lo fue en otro tiempo relativamente cercano, por no
parecerse al arte anterior o vigente, que le negó el derecho a ser considerada
como tal. Eso transformó el arte, la forma de observarlo y escribir sobre él.
A pesar de ello, aún hoy, la
mayoría de la gente, la que no está relacionada directa y
estrechamente al ámbito del arte, sigue sin entender todo lo que no sea, lo que
yo llamo, "Marinas de el corte inglés".
Ante lo que no se ajusta a la marina sigue
preguntado "¿qué es?", y tú, como una estúpida, haciendo gala de tu
mejor sonrisa, aunque el epiglotis te tamborilee, respondes con la tontería
aquella de "¿pero te gusta o no?", cuando en realidad estás pensando
"por favor, mójate, emite un juicio o calla para siempre".
El juicio ...
El hecho de ver una exposición "guiada" ya puede ser un
"lastre", aunque después la retomes y "repases" en soledad,
ya no te puedes deshacer de los comentarios subjetivos de otro, que si bien es
de suponer no navega en tu ignorancia, no tiene porque sentir o experimentar lo
mismo que tu.
El gusto...
Posiblemente, la inquietud interior que nos hace preguntarnos que es
el arte, se manifiesta con más intensidad delante de determinadas
expresiones plásticas que pierden el sentido del "buen gusto",
desde la óptica subjetiva de mi cultura, por supuesto.
Si queremos ser respetuosos ante cualquier expresión artística se ha
de intentar seguir el mismo criterio te encuentres delante lo que encuentres,
es decir, difícilmente se puede observar con "cariño" una columna de
latas, si, previamente, no has roto, suponiendo que los tengas, muchos
esteriotipos, en el sentido estricto y a la vez amplio del arte.
A propósito del crítico...
Para el proyecto de una pirámide egipcia, supongo que intervendrían
varios individuos de diferente condición, pero en la construcción final, al igual que en arte el artista y el espectador, me
parece que solo son dos los tipos de individuos imprescindibles: el que ponía
la piedra y el que decía donde ponerla, no creo que a ambos los consideraran
artistas, aunque cada uno en lo suyo -incluido el "machaca"-
seguramente lo eran.
El crítico se me aparece diciendo dónde y cómo poner las
piedras, con argumentos, a veces, más
que discutibles, y el artista, dejándose
llevar por esos "mandatos", o
pone la piedra o, con ese espíritu de revelación que le caracteriza, hace todo
lo contrario, deja de hacer lo que quiere para hacer lo que el critico no
quiere, con lo cual, de una forma u otra
saldrá perjudicado.
Por otro lado, su forma habitual de escribir, plagada de citas,
referencias, llamadas, entrecomillados, cursivas y terminología, llamémosla,
poco comunes, impide una lectura fluida, si no eres un "cerebrito" lo
tienes mal, para leer un artículo de 1/4 de página en una publicación, necesitas,
al menos y si quieres entender algo, una buena enciclopedia y eso, como el
can-can, en el metro resulta un tanto incómodo, ni que decir cuando en lugar de
un artículo se atreven con un libro, esto, a pesar del tono, me parece muy
serio, ya que impide cualquier acercamiento de los profanos, al arte y al artista, que se suponen son los
verdaderos protagonistas de esta historia, aunque tal vez se trate de eso. (*)
EL ARTE: ESPEJO DE UNA HISTORIA IV
EL ARTE: ESPEJO DE UNA HISTORIA
IV-CONTEXTO
A pesar de los avances del siglo XX, no debemos darnos demasiada
importancia desestimando otras épocas en la historia, el descubrimiento de la
rueda, o de la 1ª vacuna, o la llegada de un barco al horizonte sin caer en
picado, sin duda debieron representar algo extraordinario en su marco
histórico.
El contexto es imprescindible para ubicar el arte, sin su conocimiento
no podemos comprender casi nada.
Me gustaría hacerme entender cuando digo desmitifiquemos el arte, y
con él también el genio, el artista, lo real, lo imaginario, lo bueno y lo
malo, lo verdadero y lo falso, la belleza, el juicio estético ...
Ninguno de estos conceptos tiene sentido si no se observan desde la
perspectiva del contexto en el que se producen, por razones obvias, no somos
brujos, ni dioses, al menos yo, y, por lo tanto, no podemos afirmar que hubiese
pasado con la sola modificación, desaparición o aparición de un elemento en un
contexto determinado.
La supuesta revolución del arte de los últimos 200 años, frenética en
100, se produce paralelamente al ritmo de la evolución de la industria, la
ciencia y avances tecnológicos, el arte respondió y responde a esos impulsos,
me parece inútil, si no es por enriquecimiento personal, seguir dando vueltas y
más vueltas a lo mismo.
Los avances tecnológicos no solo revolucionaron nuestro entorno, ha
cambiado, entre otros, la concepción del mundo cultural, los medios de
comunicación ha acercado tanto a los pueblos, nos ha hecho tan
"iguales" que antiguas fronteras ya no se distinguen, no somos oriente
y occidente, por ejemplo, ahora nos diferenciamos en ricos (¿desarrollados?) y
pobres (¿subdesarrollados?), tal vez dentro de unos años seamos los
"buenos" (Europa: una grande y libre) y los "malos" (los
norteamericanos, por supuesto), perdón, me olvidaba, y los pobres (los
tercermundistas).
Siguiendo con esos avances, que en un pasado aún cercano nos amenazaba
con hacernos desaparecer, me ha sorprendido llegar aquí y que no haya pasado nada,
como me sorprendió llegar a 1984 y que tampoco pasara nada, bueno se
reafirmaban las clases sociales y, de alguna manera, la "tele" sí
rige nuestras vidas, pero mi colección de bolas de cristal me resulta ahora sin
sentido, ¡hoy 1984 me parece tal lejos y el 2001 tan cerca!.
A pesar de ello, continuamos remontándonos a la filosofía de la
antigüedad, bueno, a veces son bastantes modernos, datan de hace solo 100 o 200
años; justificados en su momento, reutilizamos conceptos y pensamientos de
otras épocas que no siempre nos ayudan a entender, tal vez porque en algunos
casos no sea necesario explicarlo todo, simplemente asumir.
De todas formas, reconozco que en la historia hay siempre algo de
regresión al pasado, es normal, no podemos aniquilarlo, y no sé a que le temo
más, si a estas regresiones o al futuro, mientras una enfermedad como el SIDA
nos ha devuelto a la Edad Media, un loco pretende utilizar el laboratorio para
crear clones humanos, en lugar de buscar soluciones a este problema inmediato,
los que piden un nuevo genio tal vez estén de enhorabuena.
Escribir es un arte, difícil pero gratificante, una vez ese arte no
residía en el empleo de las palabras, en la narrativa, si no en algo, ahora
desapercibido, que era el hecho de saber
escribir, la parte mecánica, lo que hacía sabios, doctos o eruditos a los que
tenían ese "talento", y es que cada cosa tiene su momento y lugar.
En la diversidad de manifestaciones plásticas se aprecia, al
menos, un factor común, (si no lo
hubiera , lo buscaríamos para reconocerlas y justificarlas), es su acoplamiento
a los distintos avatares que les tocó vivir, en el fondo esto les resta
originalidad. Por otra parte, al
multiplicar indefinidamente los objetos de un deseo (el de ruptura, el de hacer
algo distinto a lo anterior), éste pierde intensidad, por eso, con el tiempo
tendemos a condensar cosas "pequeñas", que nosotros mismos hicimos
individuales, en grandes familias, es decir, que prácticamente quedan reducidas
a un 1ª y 2ª Vanguardia y un "últimas tendencias", con muchos "...ismos".
Quisiera hacer una breve alusión al contexto económico, probablemente
y, como siempre, sin la II Guerra Mundial, por ejemplo, no hubiese habido nuevos
ricos, y sin estos el arte hubiese seguido otro camino, o no...
Algunos movimientos han querido criticar la importancia del factor
económico en el arte, manifestándose con representaciones poco
"transportables", perecederas o de mal gusto, para demostrar que el
arte puede ser no "vendible" ni manipulable en ese sentido, principio
que el tiempo, irónicamente, se ha encargado de contradecir. Han pasado a formar parte de la
"historia" del arte, facilitando su explotación como mercancía, esto
no quiere decir que si pudieses, te comprases una de esas obras para el
recibidor de casa, algo que sería probablemente indiscutible, por ejemplo, con
un Miró o un Rubens.
Reconozco que pensar en una de mis piezas como en la entrada de un
ático, me pone los dientes largos, muy, muy largos, con ese pensamiento, al
placer de la práctica artística se le añade un placer casi erótico.
Por último, en este apartado
una pequeña reflexión sobre el artista, al fin y al cabo él es el receptor y
reinterprete del contexto del que hablo.
Ante la obra de otro artista contemporáneo que despierte nuestra
admiración, aflora cierto sentimiento de envidia, al menos en mi, por no haber
sido capaz de haberlo "visto" antes que él o de haberlo sabido
representar así, desearías ser como él, lo cual es contradictorio, uno de
nuestros propósitos, si es que tenemos alguno, es el de ser diferentes, por eso
buscamos, probamos, a veces rayando el despropósito, en un afán incontrolable
de crear, porque en esa creación radicaría nuestra diferencia.
Supongo que es cierto que los artistas, en general, tienen miedo a
reconocerse como tales, eso, tal vez, insisto, solo tal vez, implicaría una
secreta e ¿inmoral? convicción de que "hay algo divino aquí dentro",
o también por el hecho de autodenominarse y reconocerse como artistas, o sea
darle carácter de profesión, de alguna manera los convierte como en el pasado
en artesanos, y eso, puede ser duro.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)